Las recetas de nuestros salames y longanizas se remontan a los orígenes de nuestra empresa, pero adecuada a las tecnologías y exigencias de hoy día.

Los salames son embutidos que se elaboran a partir de una mezcla seleccionada de carne y gordura de cerdo, sometidos a una salazón seca, sazonada con finas especias, algunos ahumados, y posteriormente curados y secados al aire.

Para una correcta maduración y conservación en el tiempo del producto, se le añaden antioxidantes, estabilizantes y conservantes, en cantidades cuidadosamente calculadas y controladas para asegurar el sabor y la calidad del producto que llagará a su mesa.

El período de secado varía en el tamaño del salame, y las condiciones climáticas del período de elaboración de este. La diferenciación entre los tipos de salames está dada por el picado de la carne (fino o grueso), el tamaño y presentación, selección de especias cuyo sabor resaltan más en unos que otros, ahumado o no, cada tipo identificado con un nombre particular.